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24 de octubre de 2017

Era de Sigmar - Estación de guerra: Tormenta de fuego


Hola a todos, gentes de la red y lectores de Profanus40k. Ha sido un fin de semana relajante con un lunes letal pero aquí estoy de nuevo, con cosas nuevas y frescas de lo que se cuece por ahí. Como muchos ya sabréis, estamos inmersos en una campaña en el sistema Warhammer Profanus (este finde participaré en una gran batalla mientras otros 4 jugadores de la campaña seguramente se den lo suyo en respectivas batallas) y la traducción del Odio del Traidor, pintado de miniaturas y demás.

Harec está con su liga de Blood Bowl, Ramón con sus Lamentadores personalizados y Orkímedes en el desarrollo de su propio Harridan pero hoy mi entrada viene a hablar de una variante del juego de la que hablamos poco en Profanus40k pero que no debo olvidar ya que poseo 3 ejércitos de dicho juego, la Era de Sigmar. La entrada de hoy, va sobre ella.



Rebosante de spanglish, con un trasfondo que comparado con el viejo no genera tantas pasiones, y cargadito de nuevas minis, la Era de Sigmar ha sido el precursor de lo que ahora tenemos en 40k, en octava edición. Sin embargo, posee más variantes de juego de las que pensamos y una flexibilidad enorme, aunque el sistema de juego no sea el que más despierte la vena estratégica yo no pienso abandonarle. La Torre de Plata, Hammerhal, La arena sangrienta de Khorne... la Era de sigmar dispone de muchos juegos de mesa basados en sus minis y universo. Ahora ha llegado Shadespire, del cuál hablaré en un futuro ya que lo he adquirido y puede que sea interesante (aunque es una pena que sean bandas cerradas), pero esta entrada no hablará más de él.

Aquí vamos a hablar de la Estación de Guerra: Tormenta de Fuego. Para los que sean veteranos les pongo en contexto: en el plano de fuego, en una meseta rodeada de llanuras de ceniza y lava y ríos turbulentos, se extiende la Meseta Llagaígnea, donde hasta 4 jugadores podrán disputar una campaña de la Era de Sigmar repleta de acción, puñaladas por la espalda y batallas. A menos eso promete el juego.

La caja incluye porrones de cartas y marcadores al más puro estilo "Stick & Stack" ya que se quitan y se ponen en base a pegatinas que permiten ir alterando dinámicamente el mapa según las batallas se sucedan. Esto implica que la rejugabilidad de la campaña no será muy elevada en cuanto a años pero sí que aumentará la sencillez de llevarla en el corto-medio plazo. Se suma un mapa enorme de gran calidad con todo detalle de los territorios.



El juego se basa en la premisa de las guerra de los Portales entre Reinos (planos en Dragones y Mazmorras) o Realmgates, que tuvieron una serie gorda de cuatro libros que detallaban un poco este demencial entorno donde poco importa el cuanto y el donde, sino el qué y quienes lo disputan. Así pues, hasta 4 jugadores de las facciones que quieran pueden darse crema entre ellos a lo largo de una campaña de complejidad variable (el propio libro de reglas te sugiere variantes dependiendo de disponibilidad y duraciones deseadas).





Para llevar la cuenta de tus territorios y fuerzas, se agregan marcadores para nombres de jugadores que pueden ponerse donde se hallen las guarniciones y un sobre donde almacenar las cartas de ejército de las que disponga de las cuales debe elegir aleatoriamente al comienzo de cada contienda una cantidad de ellas al azar y aplicar, según lo que disponga, los resultados para conformar un ejército y hacer frente a su adversario.




Adicionalmente se ganan nuevas habilidades de alianza para que cada una de ellas pueda llevar a cabo más acciones en batalla y sacar provecho a sus puntos fuertes. El libro también menciona las ciudades del Sigmar que se unen a la contienda por si desean usarse (básicamente es la parte comercial del compra-compra de nuevos packs de miniaturas para el conflicto, que no están mal de precio, si es que te mola el bando del Orden, yo es que soy muy del Caos y los Orcos).


Opinión

Pues de momento tengo esperanzas puestas en la campaña, es raro que decida gastarme el pastizal que cuesta un material sin miniaturas que es básicamente un mapa de carton gruso plastificado y muchas pegatinas, pero es que el potencial que he visto que contiene creo que permitirá que mis minis de la Era de Sigmar vuelvan a ver batalla. Al igual que con Octava acabé muy rápidamente cansado de ser un tiradados con poco más, esto me ofrece la oportunidad de darle otro sabor a las batallas y, dependiendo de los resultados, el azar y las estratagemas, el poder llevar a cabo gestas en nombre de los Dioses Oscuros (o de Gorko y Morko).

Hacía ya meses que Orkímedes y yo teníamos apartado el Era de Sigmar por el Warhammer Profanus y, aunque no será pronto, tengo pensado proponerle llevar a cabo una campaña con el sistema y comprobar si de verdad esta caja se hace merecedora de lo que promete. ¡Que la sangre y la muerte tiñan los campos de la meseta! Cuando la vayamos jugando iremos poniendo reportes de batalla por aquí.

¿Y vosotros qué? ¿Le dais al Sigmar? ¿Lo habéis probado?

2 comentarios:

  1. Al del meme le tenéis que llamar "Hatila" el de los Unos (cambiando la h de sitio jeje)

    Gran reseña

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    Respuestas
    1. Jajajaja buenas Wolfen, no es una reseña al uso pero ya que lo tengo hablo un poco de él, a ver si puedo mostrar más fotos, y si no, cuando lo juguemos vamos poniendo fotos de todo en su conjunto.
      Saludos!

      PD: jajajaja hubiera estado guay ponerlo "Hatila el de los Unos" xD

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